El enjuague bucal o colutorio es una solución química que utilizándose tras el cepillado nos ayuda a eliminar las bacterias y los microorganismos causantes de la caries y a evitar la halitosis.
Se trata de un producto que en ningún caso sustituye al cepillado, sino que funciona como complemento para una limpieza más completa que además nos deja una sensación de frescura en la boca durante más tiempo.
En el mercado podemos encontrar una gran diversidad de enjuagues bucales que se ajustan a las necesidades de cada consumidor, dentro de los cuales están los colutorios con alcohol y los colutorios sin alcohol.
¿Qué aporta el alcohol a los enjuagues bucales?
El alcohol lleva utilizándose más de cincuenta año en los enjuagues
bucales como conservante y como vehículo disolvente de otros ingredientes activos (antibióticos, astringentes, antifúngicos y antiinflamatorios) al tiempo que contribuye complementariamente a las propiedades antisépticas del colutorio.
¿Tienen algún efecto secundario perjudicial?
El uso de enjuagues bucales con alcohol puede tener varios efectos negativos:
Dolor en la boca: La intensidad del dolor suele ser proporcional al porcentaje de alcohol que contiene el colutorio y a la duración del enjuague. Por lo general, cuando el nivel de alcohol es inferior al 10 % el colutorio no suele producir mucha sensación de dolor.
Heridas en la mucosa de la boca: El alcohol tiene un efecto cáustico (que quema y destruye los tejidos orgánicos) y en consecuencia puede destruir los tejidos en la cavidad oral, por lo que no es recomendable su empleo cuando tenemos alguna herida en la boca.
Xerostomía (sequedad bucal): Los enjuagues con alto porcentaje de alcohol, al ser astringentes, pueden originar sequedad de los tejidos orales al alterar la cantidad y calidad de la saliva, lo que incrementa la probabilidad de sufrir caries dental, entre otras enfermedades.
¿Cuándo debemos utilizar enjuagues sin alcohol?
Hay que evitar utilizar enjuagues con alcohol siempre que tengamos algún tipo de lesión en la mucosa y siempre que tengamos mucosas sensibles. Desde IMAXDE recomendamos diluirlo en agua las primeras veces e ir disminuyendo gradualmente la disolución.
También recomendamos evitar el uso de colutorios con alcohol en niños ya que éstos pueden tragarse accidentalmente el enjuague e intoxicarse debido a la ingesta de una cantidad de flúor mayor a la indicada ocasionando malformaciones en los dientes.
El enjuague bucal sin alcohol cuenta con los mismos elementos para prevenir la caries, placa bacteriana y eliminar restos de alimento que los que tienen alcohol, además, pueden emplearse con mayor tranquilidad sin temor a irritar la boca. Asimismo, son aptos para personas que padezcan de encías sensibles, salvo contraindicación del odontólogo.
